Schauffele, el triunfo del trabajo. El californiano tira de sangre fría en el 18 para ganar el Greenbrier

Un birdie en la última bandera de su vuelta tras estar a punto de conseguir el Hoyo en Uno permite al joven jugador estadounidense lograr la primera victoria de su carrera en el PGA

Dos años después de pasarse a profesional consigue la primera victoria en el circuito. Foto: @PGATour

Con un birdie en la última bandera del día. Así es como ha conseguido la victoria el estadounidense Xander Schauffele (67 golpes, -14) en la vuelta del Greenbrier Classic al calendario del circuito estadounidense. Un birdie en el hoyo 72 de su recorrido que ha sido la diferencia entre el PlayOff y la gloria y que ha hecho claudicar al colombiano Sebastián Muñoz (72 golpes, -12), que ha concluido con la peor ronda de la semana y que tendrá que seguir esperando para levantar un trofeo en el PGA Tour.

Emoción no ha faltado en ningún momento. Hasta seis golfistas han finalizado en solo tres golpes de diferencia, una suerte para la que Schauffele se mostró más preparado que sus rivales. Y es que ya en el hoyo 1, con ese birdie conseguido tras un fenomenal golpe de approach, dio buenas muestras de lo que podía ser capaz llegado el caso. Pero no lo demostró hasta el final. Pocos daban un duro por su victoria cuando antes de iniciar la salida del 16 marchaba un impacto por detrás de Robert Streb (69 golpes, -13).

Pero esta es precisamente la magia del Golf. Un gran putt desde casi cuatro metros en el mismo 16 ponía las tablas en la clasificación y una extraordinaria salida en el par 3 del 18 –se quedó la bola a solo un metro de introducirse en el agujero- dictaba sentencia. La alegría de Schauffele era tremenda. Dos años después de dar el paso hacia el profesionalismo sumaba la primera victoria de su carrera en la gira más exigente del planeta.

El que se acabó quedando con la miel en los labios fue el propio Streb, a quien un tremendo error en el 13 le acabó condenando en la tabla. El doblebogey cuando iniciaba la parte final de su vuelta fue un tremendo golpe a su moral, que ni siquiera pudo recuperar con un birdie inmediatamente posterior.