No participaba en ningún evento de la LPGA desde el Women’s PGA Championship de comienzos del mes de octubre, cuando protagonizó una espectacular remontada viniendo del positivo del primer día para finalizar con -14 y poner el primer Grande de su carrera en la vitrina -y su undécimo título en la gira americana-. Sin embargo, poco o nada está notando la inactividad Sei Young Kim (64 golpes, -14), quien en esta jornada del movimiento ha dado un golpe encima de la mesa que podría ser suficiente para que nos quedemos sin torneo lo que queda de domingo.
La surcoreana ya es la única jugadora que ha escrito los dobles dígitos en negativo en su cartulina y, a falta de los 18 últimos hoyos de campeonato, aventaja en cinco impactos a la estadounidense Ally McDonald (68 golpes, -9), la que muchos habíamos catalogado como su gran rival para poder hacerse con el triunfo en este Pelican Women’s Championship. Sin embargo, o mucho cambia la película o a partir del lunes la asiática podrá presumir de haber llegado a la docena de triunfos en el mejor circuito del planeta.
Una realidad que se hace más dura de digerir al comentar que, cuando apenas restaban cuatro banderas para llegar a la finalización de estos terceros 18 hoyos, la diferencia de impactos era de tan sólo uno tras el birdie de ambas jugadoras en el 14 y después del Hoyo en Uno de la norteamericana dos banderas antes. La jugadora de las barras y estrellas venía apretando sin descanso y fue entonces cuando Kim se puso manos a la obra y con tres birdies de manera consecutiva –cuatro en total si tenemos en cuenta el del 14– propiciaron una escapada ante la que McDonald se quedó sin margen de reacción.
De esta manera serán cinco los impactos con los que partirá de margen la deportista coreana a falta de un domingo en el que, a al no tener presencia española, podremos detenernos en esta gran lucha final por uno de los últimos torneos del año.