Se enfrentaba a una misión casi imposible Sergio García (68 golpes, -8) en esta cuarta y última jornada del Singapur Open: el castellonense debía levantar los ocho impactos que tenía de desventaja respecto al líder en los últimos 18 hoyos si quería tener posibilidades de retener el título logrado hace doce meses. Y, aunque lo intentó, la tarea era más complicada de lo que cabría esperar. Pues aunque el castellonense fue sumando birdie tras birdie en su cartulina, el acierto de los jugadores que integraban la parte alta hicieron imposible la remontada.
Arrancaba el jugador de Borriol como un auténtico cohete en la parte inicial de su vuelta. Consciente de que los nueve hoyos finales de la tercera ronda le redujeron considerablemente las opciones de título, Sergio sabía que cualquier opción de triunfo pasaba por un inicio portentoso. Y así fue. Hasta cuatro birdies sin errores consiguió el español en unas nueve primeras banderas espectaculares. Sin embargo, lejos de continuar con la línea ascendente, el campeón del Masters en 2017 tuvo un frenazo inoportuno.
Dos bogeys en el 12 y el 15 pusieron prácticamente imposible la tarea de retener el título logrado en 2018. Máxime cuando sus rivales continuaban ofreciendo un Golf de muchos quilates. Especialmente el tailandés Jazz Janewattananond (65 golpes, -18), que puso cerco a la diferencia que le separaba del japonés Yoshinori Fujimoto (68 golpes, -16) para llevarse el título y una invitación para el Open que tendrá lugar en Royal Portrush el próximo mes de junio. El jugador taiandés cuajó una última ronda en la que brilló con luz propia para, con siete birdies y un único error, colocar la tercera victoria de su corta carrera. Javi Colomo (77 golpes, +11) tuvo un día difícil en la oficina para despedirse en el T71.