Las espadas en todo lo alto a falta de solo una ronda para dar por finalizado el Valero Texas Open. Y es que el surcoreano Si Woo Kim (69 golpes, -15), que hasta la jornada del viernes llegaba como el gran favorito al triunfo al aventajar en cuatro impactos a sus más inmediatos perseguidores, ha visto cómo el canadiense Corey Conners (66 golpes, -14) y el estadounidense Charley Hoffman (64 golpes, -13) se le acercaban en lo más alto de la tabla para poner el campeonato con todo por decidir de cara a los últimos 18 hoyos.
Particularmente buena ha sido la ronda del estadounidense, que ha completado un final de película para sellar una cartulina con un eagle, siete birdies y un solitario bogey y así conseguir la mejor vuelta de la jornada del movimiento en el TPC San Antonio texano. Aunque la del canadiense no se queda atrás, pues terminó su tercera jornada con ocho birdies y dos bogeys –cinco de estos aciertos llegaron en los siete primeros hoyos- con los que ya ha conseguido dar un susto al coreano.
Sobre todo porque el deportista asiático firmó el 69 en la ronda más floja de las tres que ha disputado hasta la fecha en el campeonato. Cuatro birdies y un bogey –éste llegó en la primera bandera del día- le permiten, eso sí, seguir ocupando el lugar más privilegiado de todos, aunque con solo un impacto de distancia sobre el mencionado Conners, con el que se batirá el cobre en el encuentro del día en esta jornada dominical.
Los que a buen seguro no estarán en esta lucha serán Rickie Fowler (73 golpes, -7) y Jordan Spieth (73 golpes, -7), quienes volvieron a calcar los guarismos pero esta vez con una diferencia: que se fueron por encima de los 72 golpes. Uno sobre par para cada uno y en estos momentos se sitúan a siete del surcoreano, una misión casi imposible por la que pelearán, sin embargo, hasta el último momento.