Se le podía haber añadido alguna dificultad pero nos parecía excesivo. Y es que Webb Simpson, poseedor de un US Open, hizo uno de esos golpes de recuperación que no nos cansamos de ver una y otra vez ya que el estadounidense, tras fallar el golpe de salida, jugó desde 120 metros con la bola reposando sobre piedras y debajo de un arbusto, con el cuerpo pegado a una valla y con unos árboles por delante en la línea de juego ¡¡y encontró el green!!
Back to fence. ??
On rocks. ??
Under a bush. ??
Through trees. ??And @WebbSimpson1 still manages to find the green. ?#QuickHits pic.twitter.com/NI7IywqV5Q
— PGA TOUR (@PGATOUR) October 10, 2020