Spiranac critica el nuevo código de vestuario y acusa a la LPGA de actuar de forma “injusta”

La jugadora estadounidense se levanta contra la nueva imposición y lamenta que “al etiquetar a las mujeres como no profesionales al mostrar escotes, la gira esté perpetuando los anticuados estereotipos sobre la conexión entre lo que lleva una mujer y su moral”

La estrella de las redes sociales se mostró muy crítica con la implantación del nuevo código. Foto: @paigee_renee

A pesar de haber contado con el trabajo y el beneplácito de algunas de las jugadoras de la LPGA, el nuevo código de vestuario aplicado en el circuito norteamericano femenino de los Estados Unidos está trayendo de cabeza a algunas golfistas, que no pueden creer que después de tanto esfuerzo para que las mujeres ocupen un espacio en el Golf, se les diga ahora cómo tienen que vestir o, dicho de otro modo, cómo no pueden salir al campo si no quieren ser sancionadas.

Una de las jugadoras que ha salido con más valentía a criticar las nuevas medidas firmadas por la propia Vicky Goetze-Ackerman –presidenta de la gira- ha sido Paige Spiranac, estrella en las redes sociales. La norteamericana, a través de una carta dirigida a Golf dot com, quiso dar su visión de los hechos en una normativa que considera “injusta” y que ahoga el crecimiento de muchas golfistas. “Hasta ahora, ninguna jugadora ha sido denunciada por llevar una forma de vestir que desprestigie al circuito. Así que, si los jugadores no son el problema me temo que estas reglas pueden haber sido establecidas como una medida de exclusión para asegurarse de que solo aquellas con un estereotipo más tradicional puedan sobresalir”, comentó.

Asimismo, la jugadora profesional dio un repaso del vestuario de algunos de los deportes femeninos con más seguimiento. De esta manera, destacó el papel del tenis, donde se dio la oportunidad a las jugadoras de lucir elegantes pero con un tipo de ropa que les permitía ejercer su trabajo con máximas garantías. “Lo mismo sucedió en el Golf. Las empresas de ropa comenzaron a incorporar materiales basados en el rendimiento, así como una actualización de estilos. Así, el restrictivo tweed se convirtió en una falda de licra flexible y los polos gruesos de algodón en prendas que podían prescindir de las mangas”, afirmó.

Y concluyó con la gran polémica de los escotes. “¿Qué constituye un escote bajo? En un mundo donde las mujeres se sexualizan de forma continua, esta nueva regla sirve como otra razón más para que se sientan avergonzadas de sus cuerpos y un recordatorio de que para ser respetadas deben alterar su comportamiento debido a la percepción externa. Al etiquetar a las mujeres como no profesionales al mostrar escotes o pantalones cortos usados debajo de la falda, la LPGA está perpetuando los anticuados estereotipos sobre la conexión entre lo que lleva una mujer y su moral”, sentenció.