Le costó más de lo previsto, pero Brendan Steele (69 golpes, -15) –al igual que hiciera Tyrrell Hatton esta misma semana en los links escoceses- ya puede presumir de haber logrado algo tan difícil como defender con éxito un título profesional. Ha sido en el Safeway Open disputado en Napa (California), lugar donde ha comenzado a andar la temporada 2017/2018 del PGA Tour y donde Tyler Duncan (75 golpes, -11) –quien comenzaba la última jornada como líder en solitario- ha visto cómo le adelantaban por la derecha para arrebatarle un torneo que finalmente ha tenido un clima de igualdad que no esperábamos tras lo vivido en los compases iniciales.
Pero es que ya lo veníamos avisando tras la ronda sabatina: el rookie nunca se había visto en una de estas y los nervios le podían jugar una mala pasada. Dicho y hecho. Duncan salió descentrado al campo, cometiendo tres errores en sus tres primeras banderas que a la postre fueron definitivos. Y es que a pesar de que le volvió a tomar el pulso al Silverado con un birdie en el primer par 5 del día –el del hoyo 5-, dos nuevos bogeys en el 7 y el 8 echaron por tierra todo el trabajo acumulado hasta el domingo.
De esto se aprovechó Steele que, sin hacer ruido y dando pasos cortos pero seguros, comenzó a jugar con el tiempo y los nervios de su rival. Tres birdies sin fallos en las nueve primeras banderas comenzaron a allanarle el camino pese a la insistencia de su compatriota Tony Finau (69 golpes, -13), que incluso llegó a situarse líder después de dos bogeys de Steele en el 12 y el 14. Pero un doblebogey del afroamericano, unido a dos nuevos birdies de Steele, dejaron la tabla tal y como la vemos.
El tercer escalón del podio lo ocuparon finalmente Phil Mickelson (70 golpes, -12) y Chesson Hadley (73 golpes, -12), dando por buenos los pronósticos iniciales que hablaban de que estos dos jugadores acabarían en los primeros lugares de la clasificación.
Pingback: De París a California, el PGA Tour arranca el nuevo curso 2018/19 con Mickelson como cabeza de cartel OpenGolf.es