Ya se le escapó el año pasado, pero a buen seguro que Steve Stricker no quiere ni por asomo que le vuelvan a comer la tostada. Es por esto que el viejo rockero estadounidense ha empezado de la mejor manera la jornada inaugural de este QBE Shootout. Un evento que, aunque no se encuentra dentro del calendario oficial del PGA Tour -no reparte puntos FedEx– tiene una cuantiosa suma de dinero para la pareja que resulte ganadora.
Si el año pasado fue Jerry Kelly, en esta ocasión su compañero de baile está siendo Sean O’Hair, quien aspira volver a conquistar su primer torneo desde el año 2011, cuando se impuso en el RBC Canadian Open. Y difícilmente podían haber ido mejor las cosas. La ronda de scramble ha sido de ellos de principio a fin, consiguiendo trece birdies y un eagle para establecer 57 impactos sobre la hierba del Tiburón Golf Club que los han llevado directamente a lo alto de la tabla clasificatoria con quince bajo par.
Pero que no se despisten mucho, pues a rebufo de ellos se encuentra la dupla compuesta por Steele y Bradley, que con doce birdies y un eagle se han quedado en catorce bajo. Tony Finau y Lexi Thompson, la pareja mixta, han iniciado el evento algo más retrasados y con el -9 se han quedado en la novena plaza.
Cabe recordar que esta campeonato se disputa en tres días y que, si en el primero de ellos el scramble ha sido el formato en el que todos se han desenvuelto, el sábado será el foursome y para el domingo nos espera el clásico fourball.