Al igual que sucediera hace un mes con la disputa del Masters de Augusta, si hay un jugador que acaparará los focos en las primeras horas de evento será Tiger Woods. El californiano, que logró pasar el corte en el primer Major del curso después de estar alejado de los terrenos de juego más de un año, volverá a estar presente esta semana en otra de las grandes citas de la temporada. Un torneo al que llega como uno de los 25 favoritos para lograr el triunfo según las casas de apuestas y que nos pondrá en perspectiva sobre su estado de forma.
“Cada día que pasa me encuentro mejor. Son ya más los días buenos que los malos. Esto significa que ahora puedo salir al campo y practicar un poco más, lo que repercute en la posibilidad de practicar más cosas”, señaló el 15 veces ganador de Grandes en la rueda de prensa previa a su debut en Southern Hills. Un campo que le va a poner a prueba después de haber superado con nota los desniveles del Augusta National, al que se refirió como “el Everest”.
“Me decía a mí mismo que ese era el campo más empinado en el que iba a jugar y fue el primero que escalé. A partir de ahora, todos serán más planos. Cada día que pasaba en Augusta me sentía más fatigado. Es algo que ahora no debería ocurrir debido a la orografía del terreno y a los entrenamientos que estoy llevando a cabo. A medida que pasen los meses, voy a estar mejor. Seguro”, señaló el deportista estadounidense.
De hecho, Woods -que ya sabe lo que es ganar un PGA Championship en este campo, pues lo hizo en 2007– cree que tiene posibilidades de ganar aquí su decimosexto Grande: “Siento que puedo hacerlo. Solo tengo que salir y hacer bien mi trabajo. Me he preparado a conciencia y estaré listo”, sentenció.
1999
2000
2006
2007@TigerWoods recaps his four career @PGAChampionship wins. pic.twitter.com/PExBlvL9e4— PGA TOUR (@PGATOUR) May 17, 2022