El californiano ya era uno de los nombres que sonaban con más fuerza en el circuito y esta actuación lo colocó en boca de todos
En 1997 Tiger ya se había hecho un nombre dentro del Golf. A pesar de su juventud -apenas contaba con 21 años-, el californiano venía de adjudicarse el trofeo al Rookie del Año y muchos vaticinaban que este descarado jugador había llegado para poner patas arriba el Golf mundial. Lo demostró en una de sus primeras incursiones en Pebble Beach, donde después de una gran semana se acabó quedando a un golpe de los números de su compatriota Mark O’Meara, quien se llevó por quinta ocasión este torneo.
A 21-year-old @TigerWoods went low at the 1997 @ATTProAm. #TOURVault pic.twitter.com/w4qeWI5j7G
— PGA TOUR (@PGATOUR) February 2, 2022






Un comentario
Me gusta el golf porque desde niño lo practique y fui caddie durante 12 años