Tiger Woods puede salir de Kiawah Island como número 1 del mundo, y también el norirlandés Rory McIlroy. Las probabilidades de ambos pasan por ganar el US PGA, pero también manejan otras opciones.
Tiger puede acabar segundo en el Ocean Course y recuperar el trono mundial, siempre que Luke Donald, el vigente líder del escalafón, termine por debajo del quinto puesto.
McIlroy, por su parte, podría ser nuevamente el mejor del planeta si vence en este cuarto Grande del año y Donald termina segundo empatado o peor. Incluso, si el norirlandés, de 23 años, acabase segundo, podría ser nº1 siempre que Donald no atraviese el corte y Tiger no sea el campeón.
El desafío está abierto entre los tres mejores jugadores del mundo, con permiso de Donald y sus 56 semanas como líder de la lista.