Si fuera poco con todas las “bondades” de las que les hemos hablado hasta el momento de la Superliga, hemos de añadirle un nuevo punto discordante para todos aquellos que todavía no tenían clara su postura acerca del circuito de los petrodólares. Y es que, según hemos podido conocer a través de unas informaciones publicadas en el Washington Post, Donald Trump podría tener reservada su parcela en este tour en forma de anfitrión de algunos de esos torneos internacionales que tienen intención de celebrarse a lo largo de la temporada.
Por ahora, al menos los complejos ubicados en Bedminster y en Doral parecen sobresalir en las apuestas para ser nombrados sedes de la gira. Unos rumores que no solo no se han desmentido, sino que se han fomentado por parte de Taylor Budowich, hombre de confianza del propio Trump. “Ciertamente, todo eso suena posible por el hecho de que el presidente Trump tiene algunos de los campos de Golf más hermosos y renombrados del mundo. Desde los acantilados de Rancho Palos, pasando por las majestuosas colinas de Bedminster hasta llegar a la icónica propiedad de Doral”, señaló.
Un negocio que no haría sino enfatizar las excelentes relaciones del otrora presidente de los Estados Unidos y Arabia Saudí, país con el que mantuvo excelentes acuerdos cuando este ocupó la Casa Blanca -y que ni siquiera se tambalearon cuando se conoció el asesinato del periodista Jamal Khashoggi-. Sin embargo, después de las recientes declaraciones por parte de algunos de los golfistas más influyentes del panorama mundial, habrá que ver en qué queda todo y si la gira liderada por Greg Norman sigue disparando con pólvora de rey a pesar de que cada vez le quedan menos argumentos de peso para plantarle cara al PGA Tour.
— Bryson DeChambeau (@b_dechambeau) February 20, 2022
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