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La asiática suma la segunda victoria en los dos últimos meses y amplía su gran estado de forma. Foto: @LPGA
A pesar de las numerosas cosas buenas que hizo Azahara Muñoz (74 golpes, -3) esta semana, lo cierto es que se nos queda muy corto el hecho de ver a la malagueña en el Top 47 del evento. Y es que si hace 24 horas hablábamos de que nuestra única representante en el Indy Women in Tech tenía ante sí una oportunidad perfecta para intentar dar el salto este domingo a la zona noble del campeonato, unos fallos puntuales nos han privado de verla entre las mejores.
Y concretamente esos errores llegaron en la fase final de la jornada. Un doblebogey en el 16 y un bogey en el 17 dieron al traste con una vuelta cargada de trabajo en la que había conseguido remontar el bogey del 8 para darle la vuelta a la cartulina con los aciertos en el 10 y en el 11. En esos momentos la jugadora de San Pedro de Alcántara estaba al alza con un seis bajo par global que la colocaba en el Top 20 con todavía siete banderas por disputar, pero entonces un trágico final la alejó del ansiado botín y la terminó dejando en tierra de nadie en la parte media-baja entre las que consiguieron acceder al fin de semana.
Unas rondas finales que si tuvieron una protagonista -como desde que diera el torneo el pistoletazo de salida- ésta fue la surcoreana Min Jung Hur (68 golpes, -21), que se limitó a defender una ventaja en la que había trabajado desde el jueves y que finalmente se quedó en cuatro impactos sobre la danesa Nanna Koerszt Madsen (67 golpes, -17). La asiática, que se dedicó durante los últimos 18 hoyos a guardar la ropa en lugar de seguir añadiéndole gasolina al fuego, tan solo erró tres calles y cuatro greenes en regulación para, con cuatro birdies sin errores, llevarse a casa la cuarta victoria en el mejor circuito del mundo -segunda este curso tras la cosechada en el Scottish Open de agosto-.
