Conforme van pasando las horas vamos conociendo más y más detalles acerca de la última ronda de Jon Rahm sobre la hierba del TPC Sawgrass. Una vuelta en la que quedaron patentes dos cosas: que el vizcaíno no tuvo su mejor día sobre un campo de golf y que algo ha cambiado en su manera de actuar cuando las cosas vienen mal dadas. Y es que después de un día difícil en el que apenas le salieron las cosas sorprendió ver a un Jon sereno, “sin perder la cabeza”, como él mismo se encargó de confesar.
Rahm tira por la ventana el PLAYERS tras una mala decisión y no hacer caso a su caddie. Incluye VÍDEO
De hecho, no perdió los nervios ni siquiera cuando se produjo una de las anécdotas, una fea anécdota, del final de torneo -y que no pudieron recoger las cámaras de televisión-. Fue en el 17, tras hacer su golpe de salida y visitar el agua. En esos momentos el deportista español perdió cualquier opción de hacerse con el triunfo. Un momento incómodo que el público respetó con un escrupuloso silencio hasta que un energúmeno con más alcohol de la cuenta en el cuerpo gritó: “¡Jon, eres basura! ¡Eres basura!”.
Rahm se sincera tras la ronda del domingo: “No he jugado bien, pero al menos no se me fue la cabeza”
Como podrán imaginar la cara del León de Barrika fue todo un poema, pero no se molestó. Tal y como cuenta Ryan Lavner en Golf Channel, el español volvió la vista hacia el público con un gesto de sorpresa más que de enfado intentando buscar al culpable segundos antes de que su caddie, Adam Hayes, visiblemente enojado, señalara a la grada reclamando justicia: “¿Dónde está la seguridad? Échenlo”. Una acción que se quedó en una mera anécdota toda vez que Jon cerró el debate de camino a la isla con un “eso fue duro”. Una acción que vuelve a poner el punto de mira en la minoría de indeseables que se cuelan semanalmente en nuestro deporte.