Casi con toda seguridad ha sido una de las noticias más importantes que les hemos llevado a sus casas esta misma semana: los primeros rumores que apuntan a que la Ryder Cup podría jugarse sin público el próximo mes de septiembre sobre la hierba de Whistling Straits.
A partir de entonces, los aficionados inundaron las redes con multitud de comentarios. “¿Esto va en serio?” “No serán capaces”. Eran muchos los que se cuestionaban las palabras que pronunció el mandamás de la PGA de América, Seth Waugh, hace unos días. Tanto es así que desde Golf dot com le hicieron la siguiente pregunta: ¿La Ryder Cup sería una Ryder Cup si no hubiera fans?
“Esta es una de las grandes cuestiones a la que estamos tratando de encontrar solución desde hace algún tiempo”, respondió en primera instancia. “Es algo que estuve discutiendo con Steve Stricker. Él es de Wisconsin, donde se va a disputar el campeonato. Él ama a la gente de allí. Jugar un Masters sin aficionados sería extraño y ni qué decir tiene jugar la Ryder sin gente. Afortunadamente, hablar de esto es prematuro. Todavía esperamos que el mes de septiembre se normalice todo”, antes de decir una de las frases lapidarias de toda la charla.
“Finalmente, hagamos lo que hagamos lo llevaremos a cabo como una entidad. El enfoque del tenis ha sido que cada evento decidiera por su cuenta. Aquí vamos a hacerlo todo como una única comunidad. Cada vez que se pierde un día nos cuesta dinero a todos. El Golf es una empresa. Nosotros dirigimos el negocio del Golf. Por tanto tenemos que pensar en todos nuestros interesados”, confesó Waugh. Unas palabras que, si bien no despejan ninguna duda con respecto al futuro torneo, abren una pequeña puerta a la esperanza si en unos meses todo vuelve a la normalidad… Aunque se antoja difícil.