Jimmy Walker debutará este 2017 en el Plantation Course at Kapalua para el SBS Tournament of Champions, el torneo que recoge a los distintos campeones del PGA del año anterior y que en esta ocasión tampoco contará con presencia española –Sergio García declinó la invitación pese a que en el mes de mayo se alzó con el Byron Nelson-. El golfista estadounidense, en cambio, lo hará como flamante vencedor del US PGA Championship que se jugó en Baltusrol, su primer Grande. Y tiene motivos más que de sobra para desear dar el primer golpe del 2017: ha hecho enormes progresos con el driver, su talón de Aquiles el curso pasado.
Cuando se acerca el final del año uno se sienta delante del escritorio y hace balance de lo que ha ocurrido durante los últimos doce meses –aunque sea mentalmente-. Se anotan los pros y los contras y se llevan a cabo unos propósitos que se intentan llevar a buen puerto. Y aquí es donde Walker se planteó muy seriamente su relación con el driver, el palo que más de quicio le ha sacado desde que debutó en la gira. No por la distancia, donde tiene un más que aceptable promedio de 300 yardas por impacto, sino por la dirección. El jugador de Oklahoma se situó en la 2015/2016 el 183 del PGA en cuanto a precisión, con un sonrojante 48 por ciento de calles tomadas.
“Si nos fijamos en el fin de semana de PGA Championship, puede verse que me fue extraordinariamente bien en las salidas, y eso se trasladó al resto de mi juego”, afirmó el propio jugador hace unas horas en Hawái. “Cuando no estoy bien con el driver mi juego se desangra, dejo de tener la confianza necesaria para el resto de golpes y pierdo la concentración”, aclaró. ¿Solución? Trabajo, trabajo y más trabajo. Walker ha pasado estos meses de vacaciones centrando su atención en el swing con el driver, y parece que no le ha ido nada mal.
“El juego se hace más fácil cuando tienes un buen drive. No se trata tanto de la puntuación en sí como de lograr la confianza necesaria para rendir en el resto de facetas del juego. Ya no siento que voy a hacer tantos bogeys. Es una sensación confortable”, explicó el estadounidense. Y en solo unas horas podrá empezar a demostrarlo en el primer evento oficial del 2017. “Estoy deseando ponerme en marcha”, sentenció.
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