Penúltima ronda antológica en en el HSBC: en solo 24 horas, Brandt Snedeker destrozó el récord del campo de Misión Hills, en Guangdong (China) con 60 golpes y Lee Westwood (PING), con 61 (11 ‘birdies’) alcanzaba el liderato del HSBC para compartirlo con el sudafricano Louis Oosthuizen (PING), cuyo 63 de la víspera y récord, como hizo también Ernie Els, quedaron borrados como hoja que se lleva el viento.
La jornada final en el HSBC de Shenzhen (China) se presenta como un rally de ‘birdies’: el inglés Westwood y el sudafricano Oosthuizen empatan en cabeza con -18 después de sumar entre ambos 29 ‘birdies’ más dos ‘eagles’ en los últimos 36 hoyos de este último torneo de la Serie de los Mundiales (WGC).
Westwood fue el sábado una máquina de fabricar ‘birdies’. Embocó hasta once y sin ‘bogeys’, pero más impresionantes aún fueron las cifras de Snedeker: 10 ‘birdies’, un ‘eagle’ y un hoyo, el 18, en el que podía haber sellado la mítica cifra de 59. Estableció un nuevo récord del campo de Mission Hills, diseño de Olazábal, con 6o golpes (-12).
Lee Westwood se igualó con el sudafricano Oosthuizen, pero por detrás de los líderes se ha abierto un abanico de posibilidades de triunfo para golfistas de la nobleza mundial: Phil Mickelson es tercero a 3 golpes, y a 4 empatan Ian Poulter, el norteamericano Bill Haas y el sudafricano Ernie Els.
De este grupo de candidatos, solo Mickelson (hoy 66 golpes) ha ganado en dos ocasiones este torneo de la serie de los Mundiales (WGC). Para Westwood u Oosthuizen sería el primer título WGC.
Snedeker ascendió 31 puestos, para ser séptimo pero a 5 golpes del dúo de cabeza.
Gonzalo Fernández-Castaño firmó 69 golpes (-3), una buena tarjeta pero minimizada por la brutal cascada de ‘birdies’ de los jugadores de vanguardia. El madrileño es decimonoveno y mejor español, aunque la buena noticia fueron los 68 golpes de un hasta ahora errático Álvaro Quirós.