Uno de los grandes momentos golfísticos de este pasado 2021 fueron los Juegos Olímpicos disputados en Tokio y, en particular por lo que a nosotros respecta, la prueba masculina llevada a cabo sobre la hierba de Kasumigaseki. Un torneo en el que se acabó imponiendo el norteamericano Xander Schauffele al aventajar en un impacto al eslovaco Rory Sabbatini y en tres al taiwanés Pan Cheng-Tsung. De esta manera, el joven deportista estadounidense sucedía a Justin Rose como nuevo poseedor de la medalla de oro olímpica. Un premio increíble para él, pero que no demostraba el gran trabajo que había detrás del golfista.
Sobre todo en lo relacionado con Austin Kaiser, su caddie, que le acompañó durante las cuatro rondas y que se quedó, únicamente, con el recuerdo de un día increíble. Fue por esto que el propio Xander Schauffele y su familia quisieron agradecerle a Austin tanta dedicación regalándole un anillo olímpico hecho a medida, algo que el donatario no se esperaba en absoluto y que habla a las mil maravillas de todo lo que significan los Juegos Olímpicos para toda la familia Schauffele.
No en vano, el padre de Xander, Stefan, vio truncadas sus esperanzas de haber sido decatleta olímpico después de que un accidente de tráfico en 1986 le dejara sin vista en el ojo izquierdo. Además, Richard, abuelo de Xander, fue campeón alemán de atletismo en 1935 y solo una lesión en el hombro a dos semanas de los Juegos Olímpicos de Berlín en 1936 le privó de optar por las medallas. Ahora que los Schauffele habían conseguido tener entre sus manos una presea olímpica, no querían que alguien de su entorno que se había sacrificado tanto no tuviera un objeto único de un momento inolvidable.
How cool is this post from Austin Kaiser, caddie for Xander Schauffele? (Via austin_kaiser/Instagram) pic.twitter.com/bUN19GvUz2
— Caddie Network (@CaddieNetwork) December 31, 2021