Sorpresón doble en Dove Mountain. Los dos mejores jugadores del ránking mundial, Rory McIlroy y Tiger Woods, cayeron sus estrenos en el Accenture Match Play después de más de 24 horas de interrupción por la nieve.
McIlroy cayó ante su amigo de infancia y compatriota Shane Lowry. El nuevo valor de Nike sigue sin levantar el vuelo. No pasó el corte en Abu Dabi, en su primer torneo del año, y en el segundo perdió por un hoyo en una modalidad que le va como anillo al dedo, el formato por hoyos.
Tiger Woods, de 37 años y no tan rompedor en match play como en medal, se inclinó por 2 y 1 frente a Charles Howell III.
«Ambos jugamos bien y no hicimos bogeys. Pero Howell anotó más birdies que yo, jugó muy bien y por eso sigue”, declaró Tiger antes de hacer las maletas en Arizona.
En cuanto a Rory McIlroy, su sensación final es que dejó ‘vivo’ a su rival en el momento que le podía haber metido algunos hoyos de ventaja, pero dos ‘chips’ en los hoyos 10 y 11 hicieron que Lowry se recuperase para ganar en el hoyo 18.
«Creo que los dos regalamos hoyos. No pude aprovechar algunas situaciones. Lo dejé meterse en el partido y de repente me di cuenta de que me quedé sin hoyos”, declaró Rory.
Sergio García ganó por un hoyo, en el vigésimo, al tailandés Jaidee; Gonzalo Fernández-Castaño sigue en su pelea (hoyo 15) frente a Francesco Molinari con un empate, mientras que Rafael Cabrera-Bello logró una de las victorias más épicas de la primera jornada frente al inglés Lee Westwood, en el nº8 del mundo, tras levantar una desventaja importante y derrotarle en el hoyo 19.
El alemán Martin Kaymer es el siguiente rival del grancanario Cabrera.