La china Shanshan Feng, de 22 años y natural de Guangzhou, escribió una página para la historia del golf. Ya avisó Feng en marzo tras ganar en el Circuito europeo -el primer título de una golfista china- que en el LPGA Tour estadounidense podía ocurrir algo similar, y así fue. Feng se impuso en el Wegmans Championship, el segundo Grande del año, y colocó el nombre de una jugadora china en el palmarés de campeones de este circuito por primera vez.
La china Feng, cuatro ‘top-10’ este año en 8 torneos disputados, acabó con 67 golpes (-5), sin ‘bogeys’ y con la tarjeta más baja de la semana, para ganar por dos golpes de renta en Rochester (Nueva York). Con 6 abajo en el global, aventajó en dos golpes a un cuarteto de jugadoras: la estadounidense Stacy Lewis, la noruega Suzann Pettersen, la japonesa Milka Miyazato y la coreana Eun-Hee Ji.
«Todavía no me lo puedo creer. Después de esta semana creo que mi confianza va a subir enteros y me ayudará a ganar más torneos en el futuro», dijo Feng. «Espero que el triunfo ayude al golf en China, pues quiero ser lo mismo que representa Li Na (estrella del tenis). Quiero ser el modelo que los jóvenes puedan seguir», apuntó.
Feng obtuvo un premio de 375.000 dólares y asciende hasta la quinta plaza del ránking mundial.
Belén Mozo tampoco pudo bajar del par por cuarto día consecutivo (76 golpes) y concluyó en el puesto número 59, mientras que Beatriz Recari puso un broche algo menos abultado a su buen concurso en este ‘major’ (74 golpes y puesto nº45), después de que la navarra comenzase el torneo en el liderato.