Javier Ballesteros Botín, el hijo mayor de Severiano, ha asumido la presidencia de la Fundación Seve Ballesteros.
Javier contará con todo el respaldo de sus hermanos Miguel y Carmen, también patronos de la Fundación, en el desempeño de sus nuevas funciones. A partir de ahora, los tres hijos de Severiano serán quienes dirijan la organización fundada por su padre y quienes traten de velar por el cumplimiento de los fines fundacionales.
Los tres hijos de Seve, de manera conjunta, dispondrán cuanto esté a su alcance para preservar el espíritu, la memoria y la huella que su padre dejó internacionalmente. Se encargarán de canalizar cuanto Seve fue y representó hacia iniciativas que faciliten la incorporación de jóvenes sin recursos al mundo del golf, y que aporten valor en la lucha contra la enfermedad que interrumpió su vida prematuramente.
Severiano Ballesteros nació el 9 de abril de 1957 en Pedreña (Cantabria) y falleció el 7 de mayo del 2011 a causa de un tumor cerebral. Se hizo profesional de golf en 1974 y, tras sumar varias victorias en torneos nacionales, logró su primer triunfo internacional en el Open de Holanda en 1976. Su palmarés, uno de los mejores de toda la historia del deporte, suma 93 títulos, incluyendo cinco Grandes: Open Británico 1979, 1984 y 1988 y Masters de Augusta 1980 y 1983.
La figura de Seve ha sido esencial para el desarrollo del golf, no sólo en España sino en toda Europa (especialmente en Europa Continental). Impulsó y dio a conocer este deporte en nuestro país; atrajo a los patrocinadores al Circuito Europeo, dotándolo de mayor atractivo; entusiasmó al público británico con un juego tremendamente imaginativo; inspiró a las siguientes generaciones; y, sobre todo, cambió el curso de la Ryder Cup, que, gracias a su aportación, alcanzó una nueva dimensión. Seve se caracterizó no sólo por su pasión y genialidad en la ejecución de golpes difíciles, sino también por su gran carisma, tanto dentro como fuera del campo.