La lógica del ránking mundial se impuso al final en Augusta para el golf español: Sergio García terminó con una buena ronda de 70 golpes (-2), en un domingo incómodo por la lluvia, para cerrar su decimoquinto Masters en el ‘top-10’, concretamente en el puesto octavo y a seis golpes del campeón, su amigo Adam Scott y con el que jugó jueves y viernes.
El madrileño Gonzalo Fernández-Castaño finiquitó su segundo Masters de Augusta en el puesto vigésimo (su mejor resultado en un Grande), con 74 golpes finales, mientras que José María Olazábal concluyó en el puesto quincuagésimo, con 75 golpes.
García, de 33 años, logra así su decimoctavo ‘top-10’ en un Grande, la mayor cifra de cuantos golfistas se encuentran en activo en el mundo.
“Es el mejor Masters que he jugado, pero el resultado no me ha acompañado. No sé si Augusta me devolverá esta cuenta pendiente. Tengo que mejorar mucho si quiero tener opciones de ganar aquí”, dijo García y en declaraciones que recoge ‘El País’.