José María Olazábal es tan pétreo por fuera como sensible por dentro. Los pupilos del capitán europeo para la Ryder Cup ya le conocen bien cómo palpita en la sala de jugadores. OpenGolf pudo conocer que en la Ryder de 2008, como asistente del entonces capitán Nick Faldo, tomó la palabra el sábado por la noche para arengar a los jugadores porque Faldo, ausente y ensimismado, declinó hacerlo.
«Todos los jugadores comenzaron a llorar», comenta a OpenGolf una fuente cercana a aquel acontecimiento, la víspera de los partidos decisivos del domingo.
Se espera que este año en la sala de jugadores y en las charlas del capitán, el nombre, el recuerdo y la figura del gran Seve Ballesteros planée sin cesar en el ambiente.
Luke Donald ya ha reiterado que Olazábal será el ‘capitán ideal’, y cabe recordar que la reunión del Comité de Jugadores europeos para decidir quién sería el próximo capitán duró exactamente minuto y medio. Fue el tiempo que tardaron todos, por unanimidad, en levantar la mano para elegir al golfistas vasco.
En la elección del escocés Colin Montgomerie, por ejemplo, como capitán de la Ryder Cup de 2010 hubo algunas voces contrarias o dubitativas. Con Olazábal, la decisión fue unánime.
«Este año va a ser muy emocionante para todos los europeos, porque capitanes así no se tienen todos los días», comentó recientemente Gonzalo Fernández-Castaño, uno de los miembros del citado Comité .
«A capitanes vamos ya uno arriba, si no dos», apuntó.