Phil Mickelson ganó de principio a fin el Phoenix Open en el TPC de Scottsdale, un recinto abarrotado (más de 150.000 personas) en donde el zurdo de San Diego, pero de la Universidad de Arizona State, jugó como en casa, en loor de multitudes.
Mickelson partió para la ronda final con 6 golpes de ventaja y se impuso por ‘solo’ 4 (-28), después de que Brandt Snedeker se convirtiera en un compañero incómodo para el último trayecto (jugó 37 hoyos sin ‘bogeys’ hasta que llegó al último, en donde falló).
El zurdo estadounidense rubricó su victoria nº 41, el segundo jugador en activo con más títulos -por detrás de Tiger Woods- y el séptimo de la historia en el PGA Tour. Es, además, su tercer título en este torneo, que le empuja hasta el ‘top-10’ mundial.
Mickelson (un ‘bogey’ y un doble ‘bogey’ en 72 agujeros) afrontó el último hoyo con 3 golpes de ventaja sobre Snedeker, quizá en el único ‘tee’ en donde el zurdo respiró aliviado el domingo por el nuevo título en su carrera.