El pasado fin de semana Graeme McDowell vio cómo su billete para los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016 se escapaba de entre sus manos para ir a parar a las de Shane Lowry. Sin embargo, el norirlandés no parece acusar la depresión y desde comienzos de semana se encuentra en Whistling Straits practicando golpes tan increíbles como éste. Por su propio bien, esperemos que no tenga que realizar muchos así durante el torneo.





