Después de tantas semanas de espera por fin ha comenzado todo. El Augusta National recibió a los golfistas con una pícara sonrisa, y muchos no pudieron seguirle el juego al histórico campo estadounidense. Dos de los damnificados fueron sin duda José María Jiménez y Chema Olazábal, que no tuvieron la oportunidad de desplegar su mejor juego y se complican su presencia tras el corte. Sin embargo, todo esto quedó en un segundo plano después de asistir a la exhibición de Jordan Spieth.
El norteamericano, que ya terminó por detrás de Bubba Watson el año pasado en su primera participación en Augusta, impuso un ritmo espectacular desde el inicio, y marcó un ocho bajo par en los primeros 18 hoyos, lo que le convirtió en el líder más joven de la historia del Masters tras la primera ronda. A sus 21 años, Spieth es la gran esperanza norteamericana y ha demostrado que llega al primer Major del año con una gran confianza y en un estado de forma envidiable –ha conseguido una victoria y dos segundos puestos en sus tres últimos eventos–.
El juego de Spieth eclipsó a quienes estaban prefijados para ser los protagonistas de la velada: Rory McIlroy y Tiger Woods. El norirlandés no tuvo uno de sus mejores días, y finalizó con uno bajo par. Aun así, el golfista europeo se mostró optimista y admitió ante los medios de comunicación que todavía está a tiempo de poder encabezar la clasificación el domingo: “Cualquier cosa por debajo del par es una puntuación decente. Me siento contento con el juego realizado, solo tengo que ser un poco más paciente con mis hierros y seguro que estaré en la lucha al final de la semana”. Cuestionado por la presión por lograr el Grand Slam, McIlroy afirmó que no va a pensar en ello mucho, porque podría ocasionarle más problemas que ventajas: “No quiero obsesionarme. Tan solo pienso en salir al día siguiente y hacerlo un poco mejor que hoy”.
Por su parte, Tiger acabó con uno sobre par, un resultado que deja contento al estadounidense después de su prolongada ausencia de los campos de golf. “Ha sido un buen día. Me he sentido bien, y esta ha sido una de las cosas para las que he trabajado tanto durante estos dos meses. Tengo un largo camino por recorrer, pero siento que voy recuperando mi juego”. El californiano tratará de mejorar para poder plantear batalla en un año en el que se cumple el décimo aniversario de su última Chaqueta Verde.