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Este pasado domingo pudimos ver como Sergio García necesitaba de doce golpes en el hoyo 3, par 4, del Blue Monster en Doral y como cerraba sus segundos nueve hoyos con 44 en la primera jornada en este mismo campo.
No es la primera vez que algo parecido le ocurre al castellonense. Hace exactamente nueve meses (12.06.11) firmaba 11 golpes en el hoyo 3 del TPC Southwind, en Memphis, Tennessee, durante la primera ronda del FedEx St. Jude Classic.
En contadas ocasiones Sergio García muestra la cara de Mr. Hyde, pero aunque sea solo en eso, en contadas ocasiones, su repercusión debido a la importancia del jugador da la vuelta al mundo.
Yo me quedo con la otra cara, la del Dr. Jekyll, la del jugador que tiene capacidad de reacción ante ese “accidente” y logra reponerse para materializar cinco birdies en los siguientes hoyos, o que firma 31 golpes por los primeros nueve en esa misma primera jornada del Cadillac.
A estas alturas nadie ignora que Sergio Garcia es capaz de lo mejor y de lo peor en un campo de golf. Llegó a número dos del mundo (Dr. Jekyll) y peligró su estancia entre los cien mejores del planeta (Mr. Hyde), para regresar después de tres años de sequía con dos victorias consecutivas a finales del pasado 2011 y volver a liderar a los españoles en el ranking mundial.
Es por ello, por su lucha y sobre todo por su actitud superándose después de un tropiezo, por lo que me quedo con Sergio “Jekyll” García.
