Lomas Bosque acogió este lunes una doble cita en el Circuito de Madrid de Profesionales. Por un lado, la competición masculina alcanzaba su undécima prueba, mientras que para la versión femenina esta era la tercera fecha de su calendario. Una convocatoria que aprovechó con creces Carmen Alonso quien, gracias a una vuelta de 69 golpes, lograba alzar su segundo trofeo en la temporada madrileña.
A pesar de que el arranque de la vallisoletana –bogey al uno y al seis- no auguraba una gran vuelta, Alonso supo encontrar la medida al recorrido de Villaviciosa de Odón para subsanar rápidamente los errores con sendos birdies antes de finalizar sus primeros nueve. Ya en la segunda vuelta, tampoco el bogey del 15 desmoralizaría a la golfista que un hoyo después volvería a restar en su tarjeta, para finalizar con un nuevo birdie al 18 y terminar con la satisfacción del trabajo bien hecho. “Si, acabar bajo par era muy importante, sobre todo en este campo donde o vas por la calle o estás muerto, y todavía tienes que meter putts. La verdad es que las cosas cada día están saliendo mejor”, afirma la bicampeona.
A quien, seguramente, no le pareció tan complicado el exigente recorrido de Lomas Bosque fue al cacereño Javier Colomo que se proclamaba campeón tras entregar una tarjeta de 65 golpes, siete bajo par, en una ronda inmaculada que completaba con cinco birdies, un eagle y ni un solo bogey. “Para que veas lo que es el golf. Precisamente, cuando peor te encuentras, sale el día y te haces un vueltón”, explicaba Colomo en referencia a la insolación que sufría el domingo durante la celebración del Pro-Am.
Problemas de salud aparte, lo cierto es que ayer quedaba constancia del buen momento de juego que atraviesa el extremeño que ya de paso, se cobraba la deuda que el Circuito tenía pendiente con él después de que la cancelación de la prueba de El Robledal le privase de su primer título madrileño. “Ahora que lo tengo, voy a por el segundo. Aunque hay grandísimos jugadores, intentaré llegar a la final con opciones de ganar.”