El exigente recorrido del Nuevo Club recibió ayer la novena prueba de Circuito de Madrid de Profesionales. Una jornada siempre complicada que pone a prueba la condición física de los golfistas y su pericia para enfrentarse a las múltiples dificultades de un diseño que se encontraba especialmente dispuesto para la ocasión.
El mejor de esta novena cita fue Ignacio Garrido que hizo gala de su condición de top ten en las estadísticas de calles cogidas en el circuito europeo, para evitar meterse en dificultades llegando a firmar hasta ocho birdies. Un resultado estratosférico de no haber alternado cuatro bogeys antes de llegar al 18 y que le dejaban con un resultado de cuatro bajo par que no le aseguraban la victoria.
Como se ha dicho en otras ocasones, ganar en el Circuito de Madrid con un resultado por debajo de -5 es muy complicado. Tanto es así, que minutos más tarde de que Garrido –que jugaba en el primer partido- entregara su tarjeta, aparecía José Manuel Mancebo con idéntico resultado.
El jugador presente en el circuito chino, se mostró menos errático que Garrido y solo tuvo que lamentar dos bogeys. Sin embargo, sus seis birdies no fueron suficientes para vencer en el desempate y el reglamento le dio la victoria al menor de los Garrido.
José Carlos Zafra, Gonzalo Vicente y Álvaro Herrero, todos ellos con -2, completaban el podio de una prueba que finalizaron 75 de los 81 golfistas inscritos.