Point Nemo o Polo de Inaccesibilidad del Pacífico. Si alguien quiere perderse en un lugar sin cobertura telefónica, éste es probablemente el adecuado, pues es el punto más remoto del planeta, a 2.688 kilómetros de tierra firme -e inhabitada-. El problema es que para llegar a él habría que embarcarse, por ejemplo, en la Volvo Ocean Race.
Los seis barcos que tomaron la salida de la etapa 5 de la vuelta al mundo a vela han rebasado este punto sin apenas tráfico marítimo, de coordenadas 48 52.5 Sur y 123 23.6 Oeste y 3.700 metros de profundidad, hace apenas unas horas. Aquí, todos extreman la seguridad, pues los seres humanos más próximos, aparte de sus rivales de la regata son, probablemente, los astronautas de la estación espacial en órbita 400 kilómetros sobre sus cabezas. El tipo de lugar, explican los regatistas, donde cualquier problema leve puede ser grave, y uno grave, crítico.
Probablemente por ello la jornada de ayer, en la que hasta cuatro barcos perdieron el control por las condiciones meteorológicas, y llegaron a ver cómo volcaban tocando el agua con el mástil, ha pasado a las tripulaciones tanta factura física y mental. «Luego de la paliza de ayer y toda la fuerza y estrés que se invirtió después de la orzada/trasluchada, estamos nuevamente en la pelea. De a poquito la tripulación fue agarrando confianza en el barco y nuevamente todos aprietan como antes», explicaba Fran Vignale, reportero a bordo de MAPFRE.
El barco español lidera tras ocho días de etapa 5 cuando se dirigen hacia los límites de hielo establecidos por la organización para evitar el peligro de los icebergs. Navegan en los 50 aulladores, nombre que recibe la latitud 50º Sur, donde al viento y las olas se une el granizo. «Hemos sacado los guantes gordos, pero ni aún así conseguimos entrar en calor, aunque, al menos, las manos no se nos congelan», explicaba Vignale.
Los de Iker Martínez son los situados más al sur, una estrategia por la que optaron al comienzo de la manga cuando los límites de hielo todavía no se habían desplazado; el viento, de momento, parece que se mantendrá más fuerte en esa zona. Sin embargo, también tendrán que navegar más millas hacia el norte para no entrar en la zona vedada.
Team Brunel y Team Alvimedica son segundo y tercero, y Abu Dhabi, Dongfeng y Team SCA cierran la flota. Dada la previsión para los próximos días, es posible que Alvimedica y el barco emiratí acaben dando caza al equipo de bandera holandesa, conforme el viento disminuya.
El grupo del norte podría tener la opción de aprovechar una baja presión que se anuncia desde hace días, pero para ello tendrían que navegar casi 400 millas más que si continúan en la dirección que llevan ahora. “Se están formando dos opciones, continuar con la depresión en el sur, junto a la línea del límite de hielo, o ir a buscar los restos que todavía están activos del ex-ciclón Pam, que nos lleven hasta Cabo de Hornos», explicaba Yann Riou, de Dongfeng Race Team.
Por todo ello, todo indica a que los próximas días se podría dar una compresión, poco antes de atacar Cabo de Hornos, a donde se espera que lleguen entre el domingo y el martes próximos. Mientras tanto la temperatura continúa bajando, y, junto a Nemo, el frío es protagonista. Y MAPFRE continúa con ganas de ganar.