Un grupo de inversores a demandado a la red social, a su co-fundador y Presidente Mark Zuckerberg y contra los bancos que gestionaron las transacciones de los valores después de su salida a bolsa al sentirse estafados por la salida a bolsa de Facebook. Los demandantes les acusan de ocultar información crucial antes de materializar la oferta pública inicial.
Las acciones han perdido un valor de un 20 % apenas tres días después de su salida cuando debutó a 38,00 $ la acción.
Cinco días después de su salida a bolsa, la red social ha salido de su silencio y ha afirmado que la acusación es «infundada», añadiendo que se defenderá «con vigor».





