Iberdrola anunció que serán 1.200 personas las que se verán afectadas por su plan para reducir la plantilla. Dicha reducción se realizará en los dos próximos años «para hacer frente a la crisis», un fenómeno que se ha cebado en su mercado español, donde los resultados han caído un 36% entre enero y septiembre.
El ajuste afectará al 4% de su plantilla total, que a finales del segundo semestre de este año ascendía a más de 30.700 personas en todo el mundo.





