Quien avisa no es traidor. Jimmy Walker se libera con el driver y domina en el Torneo de Campeones

El golfista de Oklahoma brilló sobre los greenes para aventajar en dos golpes a sus perseguidores. Foto: @PGATour

Después de unas cuantas semanas de ausencia por fin ha vuelto la competición al mundo del golf. Lo ha hecho en Hawái, en el tradicional Torneo de Campeones de comienzos de año. Y para ser sinceros nos ha deparado muchas y muy variadas sorpresas. La primera y más agradable es el increíble comienzo de Jimmy Walker (65, -8), el vigente campeón del US PGA Championship. Ya avisábamos hace unos días de que el jugador de Oklahoma se estaba preparando a conciencia para esta nueva temporada, dándole mucha importancia al hecho de mejorar con el driver, su talón de Aquiles. “El juego se hace mucho más fácil cuando empiezas con un buen drive”, llegó a comentar el estadounidense en la previa. Y vaya si lo ha hecho.

Para que se hagan una idea. Walker, exceptuando la semana en Baltusrol, fue de los peores jugadores del mundo con el driver en las manos durante el pasado año, llegando a situarse el 186 en esta clasificación, con una eficacia de un 48 por ciento de calles cogidas. Pues bien, durante la primera ronda del SBS Tournament of Champions disputado en el Plantation Course at Kapalua el norteamericano ha sido uno de los mejores jugadores en este aspecto de los 32 que saltaron a la hierba, con un porcentaje de acierto del 73,33 ¿El secreto? El driver fue recortado hasta las 42 pulgadas, ha perdido en distancia, entre 5 y 18 metros, pero ha ganado en precisión. Nada mal para abrir boca.

Si a esto le sumamos que ha sido el mejor con el putter en las manos y en cuanto a alcanzar greenes en regulación, la clasificación habla por sí sola. Seis birdies y un eagle sin fallos le colocan líder en solitario en la tabla, dos golpes por delante del triunvirato formado por Jim Herman (67, -6), Justin Thomas (67, -6) y Ryan Moore (67, -6) y con mucha ventaja respecto al texano Jordan Spieth (72, -1), defensor del torneo, que sufrió de lo lindo en los greenes y se deja para los próximos 54 hoyos una gran remontada si quiere luchar por el triunfo final.

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