Vijay Singh, el fiyiano que en su época dorada cerraba las canchas de prácticas, lidera el Greenbrier Classic después de firmar 63 golpes (-7). Singh tiene 49 años, a un paso del Champions Tour. El oceánico marcó su mejor vuelta de los últimos cuatro años, el mejor inicio de la historia de este torneo, un golpe menos que Jeff Maggert, Martin Flores y Jonathan Byrd, los segundos, y muy lejos de los 71 golpes de Tiger Woods o Phil Mickelson.
El zurdo Mickelson volvió a firmar una tarjeta sobre el par, la quinta consecutiva en esas condiciones (la peor racha de su carrera como golfista). Y Tiger tampoco comenzó con brillantez, mientras que su compañero de partido Webb Simpson, reciente campeón del US Open, tuvo un estreno convincente con 65 golpes (-5) y es uno de los jugadores que figura a dos golpes del líder, empatado con el argentino Andrés Romero.
«No me he adaptado a la velocidad de los ‘greens’. En mis últimos tres torneos eran más rápidos y aquí no», se lamentó Tiger Woods, quien acude por primera vez al Greenbrier y tras ganar el domingo pasado el tercer título de la temporada, en el AT&T National.
Singh embocó ocho ‘birdies’ por un ‘bogey’, con una racha escalofriante en los últimos cuatro hoyos del Old White TPC Course con sendos ‘birdies’. Sus 25 ‘putts’ y 14 ‘greens’ en regulación hicieron el resto.
Otra de las gestas del día la protagonizó Tom Watson, de 62 años. El veterano estadounidense concluyó al par en un campo de 7.220 yardas, ahí donde muchos jóvenes sucumbieron a esa longitud y estrechez de calles. Pero Watson atrapó 13 de las 14 del recorrido y encontró 15 ‘greens’ en regulación.
«Este campo no favorece mi juego debido a su longitud, pero tengo algunos trucos en la manga. Podría ser capaz de obtener resultado en alguno de los hoyos más largos, pues los hago más cortos», comentó Watson al PGA Tour.