Se presentaba un día difícil para cualquier jugador, pero especialmente para un Jon Rahm (66 golpes, -7) acostumbrado a rondar casi siempre los primeros lugares de la clasificación. Sin embargo, este domingo arrancaba en el Top 19, consciente de que sólo una gran ronda le iba a dejar con posibilidades de pescar un nuevo Top 10. Una vuelta que se acabó materializando en un espectacular día de Golf desde primeras horas de la mañana, cuando ya en el hoyo 6 acumulaba cuatro enormes birdies que le hacían subir como la espuma en la tabla e incluso amenazaba con buscar acomodo en el podio.
Jon Rahm comenzó como un cohete en Riviera. Este golpazo en el tres desde 79 metros da fe de ello
Jon acababa de hacerle un -4 al campo en un abrir y cerrar de ojos -en las 54 banderas anteriores tuvo que conformarse con un dos bajo par total- con una grandísima salida en el par 3 del 6 incluida. Pero justo cuando todo era regocijo y muchos veíamos como real la posibilidad de verlo pelear por el triunfo, llegó el mazazo del 8. Una bandera que se torció desde el comienzo mandando la bola al rough y que culminó con el vizcaíno marrando un putt de algo menos de dos metros para sellar el par y no poner la primera mancha en un día que hasta ese momento había sido perfecto.
No obstante, JR no cejó en su empeño y un hoyo jugado a las maravillas le dio la posibilidad de anotarse un nuevo acierto en el 9 con el que finalizaba la primera parte del recorrido. Inercia que aprovechó en sus segundos nueve hoyos para anotarse otros dos birdies en los pares 5 del 11 y el 17, lo que junto al bogey en el 14 -otra vez tras errar un putt de dos metros– le permitió finalizar el campeonato en el Top 5, igualado con otros europeos como Hovland (67 golpes, -7) y Fitzpatrick (71 golpes, -7. Además, se quedó a cinco de los americanos Max Homa (66 golpes, -12) y Tony Finau (64 golpes, -12), que se jugaron el todo por el todo en un desempate.
Homa salvó los muebles en la primera bandera del PlayOff con este enorme chip para llevarla a green
Muerte súbita que se llevó Homa en la segunda bandera tras haber fallado minutos antes un putt de un metro en el hoyo 72 que le hubiese podido dar el título sin necesidad de acudir al alargue. De esta manera, Homa se anota su segundo triunfo en el circuito tras el Wells Fargo de 2019 y deja a Finau con la miel en los labios.
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