Se encontraba ocupando uno de los lugares delanteros de la clasificación, pero lo acierto es que no había dado el paso definitivo para estar en el TOUR Championship hasta la tarde del viernes. Hablamos de Adam Scott (63 golpes, -13), quien se ha erigido como el jugador más en forma del BMW Championship después de entregar un 63 en la segunda ronda que lo sitúa como líder en solitario en Castle Pines y con una gran oportunidad de superar el Top 41 que ocupa en la actualidad en la orden del mérito y así formar parte del último torneo del curso en Atlanta.
Y es que el ex número uno del planeta dio toda una lección de golf en todos los apartados. Fue el mejor de todo el field en scrambling y en la búsqueda de greenes en regulación. Además, consiguió ser segundo en distancia de putts embocados y en putts por greenes en regulación. Todo ello coronado por una ronda sin errores que lo llevó inexorablemente a lo más alto de la tabla clasificatoria. En total, Scott se anotó nueve birdies este viernes que lo sitúan con un marcador de -13, tres impactos de ventaja sobre su gran rival en estos momentos.
Este no es otro que el capitán americano de la Ryder Cup Keegan Bradley (68 golpes, -10) que, aunque ha cedido el primer lugar de la tabla, continúa en la segunda posición después de cinco birdies y solo un bogey. Unos números que le han permitido alcanzar los dobles dígitos en negativo y así aventaja en un golpe al sueco Ludvig Aberg (63 golpes, -9), quien cierra el podio gracias a una ronda superlativa en la que se fue hasta los 63 impactos con la ayuda de un eagle, ocho birdies y un bogey.
Scottie Scheffler (72 golpes, -1), número uno y principal favorito para conquistar la FedEx Cup, cuajó una ronda al par por culpa de cinco birdies, tres bogeys y un doblebogey y se sitúa en el Top 29, muy alejado de las posiciones de privilegio.
36 holes to go to crown a champion @BMWChamps ?????
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— PGA TOUR (@PGATOUR) August 24, 2024