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El profesional canario José Manuel Rodríguez Morera nos dejó a la temprana edad de 47 años a consecuencia de una muerte súbita. Miembro de la Asociación de Profesionales de Golf de España (PGA) desde que se hiciera profesional en 1993, José Rodríguez fue de esos jugadores que comenzaron muy jóvenes de caddie en el Real Club de Las Palmas, siguiendo la estela de sus hermanos Octavio y Juan Carlos, a finales de 1981.
“Esporádicamente empecé a dar golpes, imitando cómo lo hacían los mejores y poco a poco me entró el gusanillo en el cuerpo”, comentaba en una entrevista al diario Canarias7.
Su mejor recuerdo como profesional dedicado a la competición fue aquel Campeonato de Canarias que ganó Rafa Cabrera siendo todavía amateur, y en el que José terminó con 64 golpes (-7 en total) y la tercera plaza que logró en el Campeonato de la PGA de España que se disputó en El Salobre. El último torneo que jugó fue el Fred Olsen Alps de La Gomera que se disputó el pasado 11 de julio.
José dedicaba la mayor parte de su tiempo a la enseñanza creando una gran Escuela de Niños en el campo de Bandama, su casa de toda la vida. Allí intentaba despertar la pasión a todos los niños que se acercaban al golf con su eterna sonrisa y amabilidad. Para cualquiera que se le acercara siempre tenía una sonrisa y un consejo para mejorar el golf.
“Siempre se colocaba al lado del cuarto de palos. Era su sitio preferido. Su talismán. Desde allí hablaba con todo el mundo y ayudaba a todo el que se le acercaba. Te quedabas absorto viéndole dar bolas. Tenía un drive inmenso. En el campo de El Salobre Sur, en el antiguo hoyo 16, su hermano Juan Carlos y él, jugaban a pasar la bola por encima de la montaña para llegar hasta el green. Era un espectáculo verles. Le vamos a echar mucho de menos”, comentan sus amigos.
Fuente: PGA España
