El norirlandés cumplirá 36 años el próximo 4 de mayo
Rory McIlroy, una de las figuras más emblemáticas del golf moderno, ha desvelado cuáles son los tres grandes sueños que impulsan su carrera: completar el Grand Slam con una victoria en el Masters, conquistar el Oro Olímpico y liderar al equipo europeo hacia otra victoria en la Ryder Cup fuera de casa. Estos objetivos no solo definirían su legado, sino que también cerrarían capítulos pendientes en una trayectoria ya de por sí brillante.
Con 41 títulos profesionales en su haber, incluyendo cuatro Majors (The Open Championship, el US Open y dos victorias en el Campeonato de la PGA), McIlroy ha demostrado ser uno de los mejores jugadores de su generación. Sin embargo, hay una ausencia notable en su impresionante currículum: la Chaqueta Verde del Masters de Augusta. Este torneo se ha convertido en su obsesión, el último escalón para completar el Grand Slam, un logro que solo unos pocos elegidos han alcanzado en la historia del golf.
Rory McIlroy ha pasado a convertirse en uno de los líderes indiscutibles del equipo europeo de la Ryder
Pero el Masters no es su único objetivo. McIlroy también tiene la mirada puesta en los Juegos Olímpicos, donde aspira a subir a lo más alto del podio y colgarse la medalla de oro. Aunque el golf no siempre ha sido protagonista en los Juegos, su reintroducción en 2016 ha dado a los jugadores la oportunidad de competir por la gloria olímpica, algo que McIlroy quiere añadir a su lista de éxitos.
Por último, pero no menos importante, está la Ryder Cup. Este torneo por equipos, que enfrenta a Europa y Estados Unidos, ha cobrado un significado especial para McIlroy a lo largo de los años. Aunque en sus inicios llegó a restarle importancia, describiéndolo incluso como «una exhibición» en 2009, hoy es uno de sus mayores focos de motivación. El norirlandés ha sido clave en las victorias europeas, y ahora quiere ser parte de un equipo que logre la hazaña de ganar en territorio estadounidense por segunda vez en su carrera, algo que solo ocurrió en 2012 en Medinah.
«Ganar el Masters, conseguir una medalla olímpica y otra Ryder Cup fuera de casa son mis tres grandes objetivos para el resto de mi carrera«, confesó McIlroy en una entrevista con BBC Sport. Estas metas reflejan no solo su ambición competitiva, sino también una evolución en su mentalidad. De aquel joven de 20 años que minimizaba la importancia de la Ryder Cup, ha pasado a convertirse en uno de los líderes indiscutibles del equipo europeo y en un defensor apasionado del espíritu de este torneo.
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