Las españolas Blanca Fernández y Ana Peláez, quinta y séptima clasificadas, se han incrustado en el pelotón de cabeza de La Sella Open, competición profesional femenina integrada en el LET donde la emoción; el espectáculo y la incertidumbre se han adherido a sus costuras en el ecuador de su desarrollo.
Al frente de la tabla, como ocurrió en la primera vuelta, figuran tres golfistas extranjeras -la australiana Kirsten Rudgeley; la checa Sara Kouskova y la italiana Virginia Elena Carta; todas ellas con 7 bajo par-, pero la parte alta de la tabla disfruta ya de presencia española con capacidad para ganar el torneo.
La novata Blanca Fernández, en su debut en un evento del Ladies European Tour, y la más experta Ana Peláez -en su caso con el bagaje de un triunfo en el LET en 2022- acechan el múltiple coliderato con 6 y 5 bajo par. Por si fuera poco, a corta distancia figuran otras españolas con capacidad para reeditar el título conseguido por Nuria Iturrioz en la edición inaugural de 2023.
Tanto la madrileña como la andaluza se postulan para hacerse con esta segunda edición del torneo
Blanca Fernández, con el rol de golfista profesional recién estrenado tras una brillante etapa como amateur, se desenvolvió a las mil maravillas entre profesionales curtidas en mil batallas. La madrileña, todo desparpajo –“no miro la pizarra aunque vaya bien, que como me descuide luego hago bogey, bogey, bogey”-, sorprendía con 4 birdies en los primeros 9 hoyos que le permitieron ocupar plaza de relevancia entre las mejores mediada la segunda jornada. Su segunda vuelta, repleta de regularidad -todo pares-, no sumó, pero tampoco restó, un registro muy loable para quien está descubriendo un mundo nuevo.
Un paso por detrás, la malagueña Ana Peláez sacó a relucir su bien reconocida garra mediante una actuación de las que provocan admiración generalizada. “He sentido mucha paz y mucha calma, me lo he pasado muy bien”, rememoraba la andaluza cuando repasaba su juego. Uno, dos, tres birdies… y así hasta seis a lo largo del bravo recorrido alicantino, un resultado glorioso minimizado por un solo error que le permitió ascender 45 posiciones en la clasificación para reafirmarse, también ella, en su condición de favorita al triunfo final.
Por si fuera poco, Blanca Fernández y Ana Peláez se vieron acompañadas por el buen hacer de la cántabra Harang Lee, que sacó a relucir el buen juego que lleva dentro para acabar en casa club con unos meritorios 69 golpes para un total de 4 bajo par. Undécimo puesto provisional, en el ecuador del torneo, y buenas vibraciones: “estoy cómoda, me gusta jugar en España y en este torneo nos tratan superbien”.
En las proximidades de la parte más alta de la tabla también se situó Marta Martín. La madrileña, bien en la primera ronda y bien en la segunda, vio cercenada su progresión por dos doblebogeys consecutivos en la parte final de su recorrido que la descabalgaron de la segunda plaza que llegó a ocupar durante muchos momentos. Decimoquinta a falta de la mitad del torneo, la risueña Marta Martín lo tenía claro: “quiero seguir fiel a mi juego. El resultado, después de 36 hoyos, es bueno. Sólo hay que seguir luchando”.
Igualada en ese puesto, también la balear Luna Sobrón le restó golpes al campo, una prueba más de que este La Sella Open con dominio inicial foráneo siente ya en sus carnes el rugido colectivo de una armada española dispuesta a todo.
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