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El golfista inglés se convierte en el más joven de la historia en vencer en el campeonato sueco. Foto: @EuropeanTour
No pudo ser. El sueño de ver al guadareño ocupando una de las primeras posiciones del campeonato sueco se esfumó en un abrir y cerrar de ojos, el tiempo exacto que tardó en iniciar la ronda. Partía desde la quinta posición, pero Álvaro Quirós (+1) eligió el peor día para que no le saliera absolutamente nada. No encontró calles, marró putts y, lo que es peor, su estado anímico se fue contagiando hasta acabar de un plumazo con el siete bajo par que con esfuerzo se había labrado durante los tres primeros días de competición.
Inició su vuelta con dos bogeys seguidos en los hoyos 1 y 2, que completó con otro bogey y un birdie final para acabar sus primeras nueve banderas con +2 en el día y todas las esperanzas intactas para seguir peleando por estar entre los diez mejores clasificados. Sin embargo, muy pronto todos estos pensamientos se vinieron abajo. Bogey en el 10 y doblobogey en el 11 que le retrasaron fuera de los 15 mejores. Y todavía fue peor, porque el birdie que encontró en el 17 tuvo la rápida respuesta de un cuádruplebogey con el que se fue hasta el T30 y enterró toda posibilidad de acercarse al mejor resultado de la temporada -el T4 que firmó en el Omega Dubai Dessert Classic-.
Aun así sumó el mejor puesto de este Nordea Masters para la Armada española, que tuvo en el donostiarra Adrián Otaegui (+12) y en Eduardo de la Riva (+13) al resto de integrantes, todos ellos muy alejados de la cabeza de la clasificación que, sin dar lugar a sorpresas, comandó hasta el final el inglés Matthew Fitzpatrick (-16).
El deportista británico, que inició esta ronda dominical con cinco impactos de ventaja sobre el belga Nicolas Colsaerts (-12), jugó un golf tranquilo, sin arriesgar en exceso. Fruto de este control llegaron los birdies de los hoyos 2 y 9 con los que, prácticamente, ponía el broche de oro a su extraordinaria actuación en Estocolmo. De poco sirvió que el danés Lasse Jensen (-13) se hubiera colocado a cuatro impactos, o que sus últimos nueve hoyos acabaran con dos bogeys y un birdie, la victoria estaba en el bolsillo.
Fitzpatrick suma así su segunda victoria en el circuito europeo tras la lograda en el British Masters de octubre del año pasado y da un paso prácticamente definitivo para formar parte del equipo que partirá al Hazeltine National de Minnesota para tratar de conseguir una nueva Ryder Cup para Europa.
Además el danés Lasse Jensen se mete en el bolsillo el pasaporte a Royal Troon ya que en este evento estaba en juego una plaza para el Open Championship, tercer Grande de la temporada. Para ello se requería acabar en el Top 5 y no estar previamente clasificado.
