La suerte es uno de esos factores que, aunque muchos lo pretendan, no se puede controlar. Y el ejemplo más claro lo vimos este domingo en la ronda final del LIV Golf Korea y, más específicamente, en la vuelta de Graeme McDowell. El británico salió con un birdie bajo el brazo de su paso por la octava bandera del Jack Nicklaus Golf Club después de que su bola desde el tee se marchara directamente a las gradas. Eso sí, tuvo tanta fortuna que esta rebotó para quedarse cerca del hoyo y dejarle un putt sencillo.
.@Graeme_McDowel gets a lucky break off the stand and knocks in the birdie ?
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— LIV Golf (@livgolf_league) May 4, 2025