Nelly Korda vuelve a lucir un maravilloso juego para llevarse por la vía rápida el KPMG. Luna, T52

La norteamericana se lleva a casa su primer Major tras una jornada final que apenas tuvo historia después de un gran -6 en los primeros 14 hoyos

Nelly Korda volvió a demostrar este domingo que ahora mismo no tiene rival en la LPGA. Foto: @LPGA

Hablábamos hace 24 horas de que Luna Sobrón necesitaba un gran fin de fiesta en el KPMG Women’s PGA Championship si quería tener alguna posibilidad de asomarse por la parte alta del campeonato. Sin embargo, lo que la jugadora balear encontró en los 18 hoyos finales fue una ronda con 74 impactos que la acabó desplazando hasta el T52 y con ella cualquier posibilidad de haber pugnado por uno de los lugares destacados del tercer Major del curso. Y gran parte de culpa la tuvo un final que la privó de deshacerse del signo positivo de la cartulina.

Porque lo cierto es que Luna comenzó muy entonada la ronda final. Tanto que era el hoyo 3 cuando la mallorquina se sacó un birdie de la chistera que le hizo pasar del +1 al Par con todavía la práctica totalidad del día por disputar. Sin embargo, todos sus intentos por lograr el signo negativo en la tarjeta cayeron en saco roto y un bogey en el 7 la devolvía a una realidad que había experimentado a lo largo de todo el campeonato. Y no será porque no lo siguió intentando, pues otro birdie en el 12 volvía a situarla en una magnífica posición para encarar las últimas banderas.

Pero fue entonces cuando los errores en el 13, el 16 y el 17 llegaron a su tarjeta y le provocaron una bajada con la que terminó quedándose en tierra de nadie y muy alejada de la zona glamurosa del torneo. Ahora bien: pese a todos los flashes y el seguimiento que tuvo el encuentro estelar, si hay algo que le faltó al partido estrella fue emoción. Sobre todo porque Nelly Korda (68 golpes, -19) tuvo bien claro desde primeras horas que no necesitaba sustos si quería amarrar su primer Major.

Fue por esto por lo que dio un golpe encima de la mesa desde el principio y con dos eagles y dos birdies sin errores en las 14 primeras banderas sacó del mapa a Lizette Salas (71 golpes, -16), que en el mismo período sólo había conseguido llegar al uno bajo par. Así, aunque Korda salió del par 3 del 15 con un doblebogey, poco importó. El sexto triunfo de su carrera en la LPGA -el tercero en este curso- ya está en su casa y con él afianza un número 1 en la orden del mérito que pasará mucho tiempo hasta que alguien se lo consiga arrebatar.

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