Pocas veces hemos podido ver -más allá de en algún evento Pro-Am- un golpe como el realizado el pasado viernes por el inglés Ian Poulter sobre la hierba del TPC Scottsdale. Y es que el golfista británico, que en ese momento contaba con un +3 en la tarjeta y necesitaba imperiosamente tres birdies para poder pasar el corte en el Phoenix Open, decidió puttear los dos metros que le separaban del hoyo en el tercer golpe del 16… ¡con una sola mano y la otra metida en el bolsillo! Así, como leen. El resultado, como pueden observar, no fue el esperado y acabó cometiendo el bogey.
Pocos minutos después de confirmar su eliminación, Poulter intentó argumentar lo sucedido a través de su cuenta de Twitter: “Simplemente quiero explicar lo ocurrido. La he llegado a embocar desde más de 7 metros con una mano fuera en el hoyo 9, desde más de tres metros y medio en el 12 y desde casi dos metros en el 13. Es una de las cosas que suelo entrenar. A veces funciona”. Desde luego, el viernes no. Y lo peor de todo fue sin duda tener que aguantar la mofa socarrona de la grada del 16 con 22.000 espectadores en ellas.