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El jugador español cuaja un gran día y se acerca con sigilo a la cabeza del torneo. Foto: @PGATour
Ni el viento, ni el agua, ni los continuos retrasos pueden frenar al golfista español, que va camino de sumar todos sus torneos como profesional con el corte pasado y consiguiendo grandes resultados en cada uno de ellos. Este viernes, en una jornada maratoniana en el TPC Deere Run de Silvis (Illinois) –en la que ha tenido que jugar los 10 hoyos restantes de la primera jornada más 17 correspondientes a la segunda- ha vuelto a dejar patente que es una de las grandes bazas del golf español de cara al futuro. Y lo ha hecho con la premisa de su juego, prácticamente infalible con el putter en las manos, y una serenidad impropia de un deportista de apenas 21 años.
No comenzaron bien las cosas para el vizcaíno que, después de un madrugón considerable para reanudar su partida de ayer, vio como la ronda se retrasaba hasta las 12 de la mañana –seis de la tarde en la península- como consecuencia de las numerosas lluvias que habían caído sobre el complejo, que dejaron algún que otro charco y a los operarios trabajando a destajo. Pero una vez que tuvo la oportunidad de coger los palos, el toque que no tuvo ayer le volvió de repente a las manos para finalizar sus primeros 18 hoyos con un -2 en su marcador. Aunque lo mejor estaba por llegar.
La segunda ronda ha servido para darnos cuenta de los destellos que es capaz de dejarnos el euskaldun. Hasta cinco birdies sin fallo sumó el joven golfista, al que todavía le queda el par 4 del 18 para redondear unas grandísimas 36 banderas. Esta increíble vuelta le ha valido a Rahm para subir paso a paso en la clasificación hasta meter la cabeza en el Top 10 y quedarse a cierta distancia de los actuales líderes.
Tom Gillis (-10), Steve Marino (-11) y un sorprendente Wesley Bryan (-12) –que participa por primera vez en el PGA Tour como miembro de pleno derecho después de las tres victorias del año en el circuito Web.com– son los estadounidenses que integran los primeros puestos de un John Deere al que todavía le quedan muchas cosas por ofrecernos. Cabe recordar que Jon Rahm tiene ante sí la última oportunidad del año de poder acudir a los PlayOffs de la FedEx. Y es que pese a asegurarse hace algunas semanas la tarjeta del circuito para la temporada 2016/2017, una victoria le daría ya la oportunidad de gozar de todos los privilegios de la misma desde este mismo momento.
Pero tampoco nos volvamos locos. El objetivo de este curso ya está cumplido con creces. Lo que venga a partir de aquí bienvenido sea.
