Rory, sobre la pugna con Cantlay: “Tenemos poco en común y vemos el mundo de forma diferente”

El norirlandés dio a conocer nuevos datos sobre los últimos días en Roma y saca a relucir las rencillas con el americano hasta en su propio equipo

El deportista europeo confesó que el feeling entre Cantlay y él es escaso. Foto: @RyderCup

Suele decirse que aquello que pasa en el campo debe quedarse en el campo. Sin embargo, la imagen de Rory McIlroy y Joe LaCava discutiendo sobre el green del hoyo 18 del Marco Simone originó tantas reacciones en el mundo entero que hizo imposible que todo quedara en el complejo romano. De hecho, y pese a que hace escasas semanas el norirlandés y el estadounidense parecieron enterrar el hacha de guerra, lo cierto es que el actual número dos del planeta sigue teniendo que hacer frente a esta estampa durante sus entrevistas.

La última de ellas ha tenido lugar hace escasas horas en The Irish Independent y ha tenido al cuatro veces ganador de Majors y a Shane Lowry como grandes protagonistas. Y lo cierto es que en esta hemos conocido más detalles de la intrahistoria que tuvo lugar una vez que los jugadores abandonaron el campo en busca del hotel. “Mi relación con Cantlay es, en el mejor de los casos, normal”, comenzó afirmando el propio Rory, al que le sorprendió el tono que tomaron los últimos hoyos de su partido pese a haber intentado que el público dejara de tomarla con el americano.

“No tenemos muchas cosas en común y vemos el mundo de manera muy diferente. No obstante, hubo un momento que me di cuenta que los aficionados le estaban atacando en exceso e intenté calmarlos. Pero luego llegó el gesto de Joe. Eso fue lo que realmente me molestó. Eso y que mientras me dirigía al vestuario se abalanzara sobre mí una marea roja. Siendo sinceros, eso no estuvo nada bien”, señaló el vigente campeón del Scottish Open.

“Pero la cosa no quedo aquí. En el hotel tanto Ricky Elliott como Claude Harmon –caddie e instructor, respectivamente, de Brooks Koepka– me pararon y me dieron la razón. Me comentaron que Joe solía ser un buen tipo cuando llevaba la bolsa de Tiger, pero que ahora le tocaba acompañar a un idiota”, añadió, poco antes de describir el primer gesto de Luke Donald tras las imágenes en el green.

“Llegué a la sala del equipo tras un baño y entonces entró Luke, que se sentó sin saludar a nadie. Pensaba que estaba enfadado, pero me miró y me dijo que le había encantado lo que había hecho. Entonces los chicos empezaron a golpear la mesa. Fue un momento que nos hizo venirnos arriba”, sentenció.

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— Boston Common Golf (@commongolf) November 7, 2023