En la edición anterior del Tournament of Champions, evento que recoge a los campeones en el pasado curso y al resto de los finalistas en la final del PGA Tour, Dustin Johnson, uno de los grandes bombarderos del Circuito, aceptó el reto del PGA Tour de jugar desde el tee del 18 hasta el green del 1 del Plantation Course en Kapalua como si se tratase de uno solo, lo que le convertía en un hoyo de 1.100 yardas, algo más 1.005 metros. «Sin duda el hoyo de golf más largo que he jugado«, declararía DJ al Tour.
Johnson necesitó de driver, madera, madera, wedge y dos putts para acabar con este monstruoso hoyo que podríamos catalogar de par 7 si lo comparamos con el existente en Gunsan Country Club de Corea, país donde se encuentra, posiblemente el más largo del planeta con más de 1.000 metros, aunque el PGA lo catalogó como par 8.