Nos adentramos por completo en una semana destinada a darnos muchas alegrías. El Estrella Damm Andalucía Masters ya está aquí y con él la posibilidad de volver a disfrutar del RC Valderrama, uno de los iconos del sur de Europa y un campo único por los retos a los que tienen que hacer frente todos los jugadores que se aventuren a completar sus 18 hoyos. Son muchas las anécdotas que nos vienen a la cabeza al pensar en el complejo gaditano. Después de todo, por su hierba han transitado algunos de los mejores jugadores del planeta en eventos que van desde el desaparecido Volvo Masters, el WGC-Cadillac Championship hasta llegar a la conocida como Ryder de Seve en 1997.
Decía el añorado Jaime Ortiz-Patiño que iba a convertir este pequeño rincón de la geografía española en un auténtico paradigma del Golf. En aquel momento nadie le creyó, pero el paso de los años le acabó dando la razón hasta ver pisar su hierba a algunos de los jugadores más grandes que ha dado este deporte. Desde 1985 el RC Valderrama es un símbolo de excelencia y entusiasmo, llegando a recibir por el gran público el sobrenombre del “Augusta europeo”. Y es que después de todo, a su cuidado diseño original llevado a cabo por Robert Trent Jones le han seguido una serie de remodelaciones de las que ya nos hicimos eco en este artículo y que culminaron hace unos meses con la nueva instalación de césped para resistir a los meses más cálidos.
Todo ello para lograr tres objetivos: competir con los mejores campos del mundo, invertir para el futuro optimizando los costes de mantenimiento y tener el campo al nivel de torneo durante los 365 días del año. Y a la vista está que se ha logrado con creces. Porque a pesar de no ser el campo más largo de todos cuantos componen el calendario del circuito europeo, nadie pone en duda su dificultad en estos tiempos en los que parece que los complejos del mundo entero busquen hacerse más grandes para contrarrestar a los grandes pegadores. A Valderrama no le hace falta. Sus calles estrechas y sus múltiples peligros en forma de bunkers u obstáculos de agua suelen ser garantía de sufrimiento para muchos jugadores, tal y como podemos ver reflejados en este mapa interactivo elaborado por Betway.
No hay más que ver el hoyo 15, uno de los más complicados de todo el mundo. Conocido como “El Puerto”, este par 3 cuenta con un green largo y estrecho protegido por árboles y tres bunkers que puede acabar dándole la vuelta a una buena cartulina. Al igual que el 17 –Los Gavilanes-, un recorrido de infausto recuerdo para Tiger Woods en el que un triplebogey en 1999 estuvo a punto de costarle el Volvo Masters. En definitiva: un campo con mucho por ofrecer del que hablaremos largo y tendido en lo que queda de semana.