La Cena de Campeones de Jon Rahm en el cumpleaños de Seve: «Fue una noche maravillosa»

«Incluso Tom Watson, al final de la cena, se levantó y dijo lo feliz que estaba de ver la camaradería dentro de nuestro grupo’‘, se comentó

La tradicional foto de los Campeones en Augusta con Jon Rahm en el centro

Jon Rahm cumplió con la tradición este martes de invitar a los Campeones en Augusta, 31 en esta ocasión además del presidente del icónico complejo Fred Ridley, a cenar con un menú netamente vasco. Si bien los asientos no están asignados oficialmente, si que es cierto que cada uno de los Campeones se sienta tradicionalmente en «su» lugar. Ya lo decía Sergio García: «Jon como campeón se sienta en la cabecera. Ya el año que viene -si no gana- espero que se siente junto a Chema o a mi lado». En la actualidad Sergio se sienta a la izquierda de Olazábal.

La cena giró en torno a Seve -este martes hubiera cumplido 67 años-. «Fue una gran noche. Fue una noche emotiva», dijo Larry Mize, el ganador de 1987. «Ben (Crenshaw) se aseguró de que esta noche todo girase en torno a Jon, Seve y Jackie Burke«. Burke, Campeón en 1951, fallecía este pasado mes de enero a los 100 años de edad, sólo 10 días antes de cumplir 101.

Rahm se sentó a la cabecera de la mesa, al lado de Ben Crenshaw, siendo ésta la primera vez que un golfista de LIV ejercía de anfitrión de la cena y como en el año anterior, no hubo ningún momento de tensión salvo en el momento del brindis, que al igual que el pasado año, Phil Mickelson prefirió no brindar. Charles Coody, Campeón en 1971, comentaba: «No podría haber sido más agradable. Incluso Tom Watson, al final de la cena, se levantó de su silla y dijo lo feliz que estaba de ver la camaradería dentro de nuestro grupo. Fue una noche maravillosa».

Tal y como estaba previsto, el chef José Andrés sirvió unos entrantes compuestos de un surtido de ibéricos, la tradicional tortilla de patata,  croquetas de pollo, idiazábal con trufa negra, chistorra con patata y las lentejas estofadas de su abuela. «José Andrés llamó a mi abuela para pedirle la receta», declaraba el de Barrika hace unas semanas cuando se dio a conocer el menú.

A ello le siguió un primer plato compuesto de una ensalada de txangurro, mientras que el plato principal tuvo a elegir chuletón a la parrilla o rodaballo al pil-pil. El postre consistió en unas milhojas de crema y nata. Todo un menú patrio con el que Rahm conquistó los paladares antes de iniciar la defensa del Masters.

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