Jordan Spieth sigue en sus trece de convertirse en el golfista más joven de la era moderna en conseguir dos Majors. El ganador del Masters de Augusta firmó en el turno de mañana una ronda en 67 golpes, tres por debajo de par del campo, lo que le propició sumar un -5 en el global y situarse en cabeza del campeonato junto a Johnson y Stenson.
Lo que el texano desconocía era que la jornada de la tarde iba a ser tan favorable para sus intereses. Los, por entonces, líderes pincharon y el golfista de 21 años se colocó al frente de Chambers Bay junto a Patrick Reed, uno de los pocos supervivientes al descalabro generalizado.
Por la tarde Dustin Johnson estaba empeñado en mejorar el T4 conseguido el año pasado en Pinehurst. El golfista de Columbia se encontraba brillando con luz propia sobre la hierba de Chambers Bay cuando, tras unos últimos 6 hoyos cargados de errores (hizo 3 bogeys), dio su brazo a torcer y se bajó de las posiciones de liderato.
Y es que en la jornada de la tarde a la dificultad del campo hubo que sumarle la aparición del viento, que se convirtió en un quebradero de cabeza para muchos. De esta manera, sólo 16 golfistas siguen con guarismos en negativo, una situación en clara contraposición con la vivida el jueves, cuando eran 25 los que finalizaron la ronda en -1 o mejor.
El que se despidió definitivamente de Chambers Bay fue Tiger Woods. El californiano necesitaba algo más que un milagro después de los 80 golpes del jueves, y no lo logro. Es más, se fue de University Place con un amargo sabor de boca después de entregar una tarjeta cargada de bogeys (8) y con apenas dos birdies. Tiger finaliza así el peor Major como profesional de toda su carrera (+16) lo que le ha llevado a compartir una de las últimas posiciones del evento.
En cuanto a la actuación de los españoles la suerte fue esquiva para los nuestros y solo García seguirá presente el fin de semana. Mala jornada para ambos, que llegaban con todas las posibilidades para acceder a la fase final. Jiménez presentó una tarjeta libre de birdies y con 7 bogeys y un doble bogey (+9), lo que echó por tierra el trabajo del jueves, cuando concluyó su vuelta en -1. Por su parte, Sergio García se salvó por los pelos de la eliminación. 7 bogeys y sólo dos birdies para el de Borriol, que finalizó en +5, nota de corte del US Open.
El susto del día lo dio el australiano Jason Day, que sufrió un ataque de vértigo en el hoyo 9 y acabó en el suelo. El golfista, finalmente, pudo completar su vuelta con alguna dificultad pero, tras someterse a diferentes pruebas, no parece que vaya a tener problemas para estar en el tee de salida en la tercera jornada.
Chambers Bay dio otra vuelta de tuerca en su endiablado recorrido y los jugadores lo notaron. ¿Podrán seguir éstos aguantando la presión y, lo que es por, las directrices de este exigente campo?
Johnson y Stenson, primeros líderes en Chambers Bay. Buen comienzo de Jiménez (69) y García (70)