Viendo de nuevo a Rafa Nadal en su partido ante Novak Djokovic, los profesionales que retransmitían el partido en Eurosport comentaban la fortaleza mental de ambos jugadores. Pero, ¿Qué factores son los que hacen tener esa capacidad mental y emocional tan equilibrada y sostenida en el tiempo?
Dicen que la parte mental en el Golf es tan importante como la técnico/táctica y física. Yo no estoy del todo de acuerdo en esta afirmación, sobre todo en el nivel más profesional. Para ser el número 1 tienes que ser el mejor pegando a la bola desde todas las posiciones de tee al hoyo, ser el que mejores recursos tiene para salir de situaciones complejas y saber elegir estrategias en cada golpe. Por tanto, la parte de habilidad, talento y físico es la más importante, sin duda.
La persona más fuerte mentalmente del mundo -si es que eso se puede medir-, puede coger un palo de golf por primera vez y por mucho pensamiento positivo o capacidad de regulación mental que tenga, lo más seguro es que no dé una bola derecha y de más de 50 metros. Por lo tanto, no, la fortaleza mental no sirve si no hay un trabajo duro que te lleve a lograr tus objetivos.
Y aquí quiero llegar: tener un equilibrio mental y emocional, saber mantener un estado óptimo de tensión durante los entrenos y en la competición, es lo que hace a los profesionales llegar a ser un número 1.
Digamos que la parte mental es lo que hace la diferencia. Cualquier jugador del circuito sabe hacer un fade, un draw y un stinger, sacar la bola del bunker de mil maneras o golpear la bola con el mango si hace falta. Sin embargo, a nivel profesional, la diferencia entre el primero y el segundo lo suele marcar ese punto más de mantener la concentración, la autoregulación de emociones y sobre todo ese estado mental que da el equilibrio en cada golpe.
Hoy te traemos unos pasos para que puedas trabajar en tu mente y emociones, tanto en el Golf como en la vida.
Tener una meta es lo que nos hace ilusionarnos con algo. Puede ser tener un Macro Objetivo, como bajar en un año 10 puntos de hcp. o adelgazar 15 kg. y a la vez generar Micro Objetivos que nos van a ayudar a conseguirlo. Lo llamaremos “El primer golpe”.
Márcate un tiempo para empezar y para conseguirlo, revisa que sea un reto pero que a la vez sea alcanzable, para no aburrirte o estresarte.
La pregunta que te lanzo es la siguiente: ¿cuál sería el primer golpe que te va a lanzar a tu gran objetivo? Este primer golpe te tiene que llevar directamente al siguiente. Crea tu estrategia en el tiempo.
Tener objetivos es saludable, ilusionante y necesario para sentirnos vivos. Pero, ¿qué estoy dispuesto a hacer para conseguirlo? ¿Qué rutinas, hábitos, quiero y estoy dispuesto a generar para lograrlo?
Tendemos a olvidar nuestros compromisos, sobre todo con nosotros mismos. “Voy a adelgazar, voy a ir al gimnasio 3 veces a la semana, voy a dejar de fumar, voy a empezar a tocar la guitarra…”
Nuestra mente está diseñada para ahorrar energía, por eso necesitamos generar hábitos para darle a nuestro cerebro sensaciones de bienestar que tengan impacto en nuestra “zona de recompensa” que es la que genera dopamina y serotonina, que son las hormonas que nos dan equilibrio y sensación de bienestar.
Por tanto, recuerda revisar tus auto compromisos y cómo estás alineado respecto a ellos. Es un contrato contigo mismo, tan importante o más que cualquier otro generado con otra persona.
Mientras trabajas en tus objetivos, observa desde dónde lo estás haciendo. Si desde la obligación o desde el deseo y la motivación para conseguirlo.
Motivación significa, “lo que te mueve”, no te olvides cuál es la auténtica razón por la que tiene sentido para ti conseguir algo, ¡tu propósito!
Entrena tu concentración en la cancha, creando tu propia rutina en cada bola, generando en la alfombra dificultades que puedas encontrarte en el campo, manteniendo un lenguaje interno y externo positivo en todo momento -se acabó eso de acordarte de diferentes universos en cada hook o slice-.
Prepara tu actitud en cada partida, lo que se entrena se multiplica en competición. Si entrenamos la frustración, el cabreo o la desidia… No lo dudes, está se reproducirá e incrementará.
En todo partido, hay malos golpes -a veces demasiados-. En esas ocasiones utiliza tu capacidad de adaptación que has entrenado para volver a tu “estado de equilibrio” mental y emocional que has trabajado anteriormente.
Trabajar en tu fortaleza mental hará que te puedas reponer mucho más rápido y fuerte ante los reveses del juego en el campo y en la vida. No significa que no vayamos a tener problemas o situaciones complejas y dolorosas, pero sí te puedo asegurar que te va a aportar recursos y una gran capacidad para afrontarlas o resolverlas para seguir creciendo. Y te digo algo más, con esta actitud hacemos crecer también a los demás.
Observarnos cómo jugamos y nuestro comportamiento en el campo dice mucho de quién y cómo somos verdaderamente en la vida. Quien se hunde en un par de golpes malos, le pasará lo mismo en su vida. Quien se viene arriba en las dificultades, así será en la vida. Y quien es tramposo, así será en la vida… Cualquier actitud que tengamos en el campo hablará mucho de cómo es nuestro comportamiento fuera de él.
Sí, conseguir nuestros propios hitos nos genera confianza y es “siempre” el resultado de un gran esfuerzo y trabajo realizado desde la ilusión y la motivación personal. Es lo que nos emociona, nos mueve y nos hace dar sentido a todo lo que hacemos. Por eso amamos tanto el Golf y en ocasiones podemos llegar a odiarlo, porque es pura emoción y nos reta a conseguir resultados.
Ahora depende de ti, ¿Cuánto estás dispuesto a hacer para cumplir con tus objetivos, con tus promesas a ti mismo, desde tu equilibrio mental y emocional?
¡Cuando lo consigues es gracias a Tu Fortaleza Mental!
David Espinosa es Coach Deportivo y facilitador de procesos en equipos. Además de un apasionado del golf e investigador de todo el backstage que implica este gran juego en la parte mental y emocional.